Esta pequeña playa semiurbana, enclavada en un entorno natural y rodeada de grandes formaciones rocosas, se caracteriza por su exposición a fuertes vientos que aportan un toque salvaje al paisaje. A pesar de su protección natural, carece de servicios, lo que preserva su ambiente tranquilo y aislado, ideal para quienes buscan un entorno más natural y menos intervenido.